Laminación
Es crítico en un proceso de rebobinado, la temperatura a la cual se quita el barniz viejo. Los Ingleses y la EASA coinciden en que esta temperatura no debe exceder los 400 ºc. Con los procedimientos observados por este autor en Latinoamérica es común encontrar que el barniz viejo se quita con soplete o antorcha. De esta forma es fácil sobrepasarse y dañar el aislamiento interlaminar. De esta forma aumentan considerablemente las pérdidas disminuyendo así la eficiencia. Esto conlleva a gastos de operación mucho mas grandes.
Es obligación suya preguntar a su taller reparador que hornos tiene disponibles para hacer este proceso, o en caso de que usted sea un reparador responsable que ha invertido en hornos con control de temperatura, que calidad de hornos, si es que se usa alguno, utiliza su competencia.
Normalmente, cuando se asigna un trabajo, en la industria, lo suele hacer el departamento compras al oferente con el precio mas bajo. De esta forma, lo que se ahorra en reparación, se paga en la cuenta de la electricidad y también en rebobinados repetidos, en forma prematura.
¡Cuide su aislante interlaminar! Utilice hornos de quemado controlados y que no se sobrepase la temperatura recomendada: 360 ºc para bobinados con material orgánico y 400 ºc para bobinados que utilizan material inorgánico.
Medioambiente
En países en vías de desarrollo es fácil ignorar las reglas del juego. En muchos casos no existen reglas del juego para vapores quemados contaminantes. Por lo tanto cuando se compra un horno se utilizan como criterios: soporte, precio, calidad, tamaño, combustible que se utiliza, etc., pero no si el horno que compro será capaz de combustionar los gases dañinos hasta convertirlos en gases mas inocuos.
En otras palabras, muchas veces el horno quema barniz que después en forma de gases nocivos se ventila al medioambiente. Otros hornos tienen etapas de quemado posterior de gases que elevando la temperatura mucho mas desintegran estos químicos, ventilando vapores menos contaminantes. Obviamente estos últimos hornos cuestan mas para comprar y también para operar.
Otra forma de evitar contaminación es con vaporizadores de agua ubicados en la parte superior del horno. Cuando los sensores detecten que ha habido un incremento inusual de la temperatura, esta lluvia interna detendrá las combustiones indeseadas, protegiendo el núcleo y ademas las emisiones al aire de humos y vapores indeseados.
Control de Proceso
Esto se hace con controles inteligentes que siguen el perfil pre-programado en caso de que se este usando el horno para curado. Cuando un barniz se cura inapropiadamente, existen burbujas que no son eliminadas y quedan atrapadas cerca de la superficie del aislante. De esta forma se favorece la ocurrencia del llamado Efecto Corona, que podría determinar la muerte prematura del bobinado. Estos controles operan quemadores que en muchos casos funcionan con control de caudal de gas para evitar el apagado y encendido. De esta forma se asegura mejor el proceso y ademas se extiende la vida útil de las bujias de encendido.
Facilidad de Maniobras
Esto incluye diferentes métodos para ingresar y retirar el material del horno. Incluyendo rieles desmontables para operar carros que sean empujados dentro del horno, guías para aparejos internas, etc.
Otros recursos de interés
